NOTA DE REDACCIÓN
Pero ten presente que un Partido se construye con serenidad y altura, con pasión pero con cabeza fría, con gran derroche de energías pero con plan.
Washington (EFE).
La inyección de lodo pesado para tratar de poner fin al derrame de petróleo en el Golfo de México fracasó, admitió hoy la petrolera BP, que pasará ahora a intentar un nuevo método.
“No hemos podido detener el flujo” de petróleo que mana del pozo a 1.500 metros de profundidad, declaró el director de operaciones de BP, Doug Suttles, en una rueda de prensa. “Hemos tomado la decisión de pasar a la siguiente opción”, agregó.
Esa opción consiste en cerrar la tubería rota con robots submarinos y cubrir los restos con una cúpula, una solución similar a la que ya se intentó hace unos días sin éxito.Esta operación podría tardar cuatro días en completarse, indicó el alto ejecutivo.
En sus declaraciones, Suttles no pudo precisar qué porcentaje de éxito atribuirle al próximo intento. Inicialmente, BP había calculado que las posibilidades de triunfo de la inyección de lodo pesado, junto a otros materiales para bloquear las tuberías, se encontraban entre el 60 y el 70 por ciento.“Tenemos confianza en que la operación funcionará, pero evidentemente no podemos garantizar el éxito”, declaró Suttles.
La inyección de lodo pesado había comenzado el pasado miércoles, la primera vez que se intentaba a una profundidad semejante, 1.500 metros.
En total, la compañía inyectó 30.000 barriles de lodo y efectuó tres intentos distintos de bloqueo de la tubería con basura como cubos de plástico, neumáticos usados y pelotas de golf para taponar la tubería.
CASI 20 MIL LITROS DIARIOS DE PETRÓLEO EMANAN DEL POZO
El derrame se ha convertido en el peor de la historia, una vez que los científicos han corregido sus cálculos, que inicialmente contaban que la fuga equivalía a 5.000 barriles de petróleo al día, y ahora consideran que el crudo que mana del pozo alcanza entre los 12.000 y los 19.000 barriles diarios.
La catástrofe, que comenzó tras la explosión de la plataforma petrolera “Deepwater Horizon” el 20 de abril, se ha convertido en un verdadero quebradero de cabeza para el Gobierno estadounidense y el presidente Barack Obama, contra el que crecen las críticas acerca de la gestión del problema.
Obama visitó el viernes por segunda vez desde que comenzó el desastre la zona afectada en las costas de Luisiana y ordenó que se triplicara el personal que trabaja en las tareas de lucha contra la marea negra, hasta ahora 20.000 personas.
“El responsable en última instancia soy yo”, afirmó el presidente estadounidense, que aseguró a los habitantes de la región afectada que “no están solos”.
Mientras tanto, los expertos del Gobierno calculan que ya se han vertido en el Golfo un mínimo de 68 millones de litros de petróleo.
Un informe elaborado por el BBVA Compass, una entidad financiera implantada en el sur de EEUU y filial del grupo español BBVA, calcula que el impacto económico del derrame podría ascender a 4.300 millones de dólares.
De esta cifra, un 93,6 por ciento serían pérdidas en el turismo en los estados de Florida, Alabama, Misisipi y Luisiana, indicó la entidad, que advirtió que el coste final dependerá de la cantidad y la permanencia del crudo en las aguas.
El agujero sigue abierto. El petróleo continúa escapándose hacia las aguas del Golfo de México y los daños no podrían ser más lamentables. Mientras la British Petroleum busca otra solución -inyectando arena, arcilla y cemento para sellar el escape- la comunidad estadounidense se ven perjudicada por el agua, que ahora es negra.
“Esto es devastador para la comunidad. En esta zona estamos en verano, vamos a la playa y a los resorts. La pesca, los camarones, cangrejos todas las actividades que tienen lugar en el agua y todo está acabado”, dijo Bill Watkins, un residente de la zona.
Recientes investigaciones confirman la presencia de irregularidades en las inspecciones de seguridad industrial que avalaron el funcionamiento de la plataforma. Además se cuestiona haber utilizado otro químico extremadamente pesado para dispersar el petróleo, pues los daños sobre el arrecife son aún peores. Los más afectados son los pescadores, mientras millones de galones de petróleo siguen siendo expulsados al mar.
“Nadie está más molesto que yo, porque últimamente como cualquier Presidente, cuando esto pasa, todos los días piensas en cómo resolverlo. Así que hemos mandado más de mil personas al golfo, grúas, equipo, abogados, para ayudar a los pescadores que han perdido sus vidas como consecuencia”, señaló el presidente Barack Obama
(AP)
BBC MUNDO
Una niña de siete años de origen hispano se convirtió en la más reciente protagonista del debate sobre la reforma migratoria al preguntarle a la primera dama de EE.UU. Michelle Obama sobre la política de deportación de indocumentados de su esposo, el presidente Barack Obama.
El episodio se produjo en una escuela del norte de Washington, a la que asistieron Michelle Obama y la primera dama de México, Margarita Zavala, como parte de los eventos de la visita de estado del presidente Felipe Calderón.
“Mi mamá dice que (el presidente) Barack Obama está llevándose a todos los que no tienen documentos”, dijo la niña sentada al lado de Obama y captada por las cámaras de televisión.
La intervención pareció tomar por sorpresa a la primera dama estadounidense, quien le aseguró que el gobierno está haciendo lo necesario para “asegurarse de que la gente esté aquí con los papeles necesarios”.
La niña entonces explicó que “mi mamá no tiene papeles” y Obama insistió en que “todos debemos trabajar juntos en el Congreso para asegurarnos que eso pase”, un mensaje que a muchos les sonó como una vacía explicación de agenda política en todo caso más propia para gente de mayor edad.
Rostro del drama
Inmediatamente los grupos que promueven la reforma migratoria en EE.UU. aprovecharon la aparentemente espontánea intervención de la niña, cuyo nombre se ha mantenido en reserva, para promover el “drama humano” de la falta de acción sobre el tema.
“Niños de segundo grado no deberían vivir atemorizados por que sus madres vayan a ser deportadas”, afirmó Deepak Bhargava, director del Centro para el Cambio Comunitario, una organización que promueve los derechos civiles ubicada en Washington.
“Rompe el corazón”, según Frank Sharry, de Voz Americana, un grupo de promoción de políticas públicas de tendencia liberal de la capital estadounidense.
“Es claramente una mala situación” reconoce Mark Krikorian, del Centro para Estudios de Inmigración, que se opone a reformar las leyes para regularizar a los que actualmente carecen de documentación.
Krikonian afirma que la franqueza de la niña al hablar con la primera dama “refleja un alto grado de comodidad” en el que “los inmigrantes ilegales marchan frente a cámaras de TV, dan entrevistas a la prensa y gestionan en los pasillos del Congreso sin que les pase nada”.
Todo sigue igual
Niños de segundo grado no deberían vivir atemorizados por que sus madres vayan a ser deportadas
Sin embargo, incluso los más furibundos antireforma migratoria no han cuestionado la decisión del departamento de Seguridad Interior de no investigar a la niña ni a su familia.
“La niña seguirá asistiendo a la Escuela New Hampshire y recibirá educación de alta calidad”, afirmó el jefe de Escuelas Públicas del Condado de Montgomery, Brian Edwards, quien aclaró que las leyes prohíben verificar el estatus migratorio de los estudiantes. En la Casa Blanca, la Oficina de la Primera Dama no ha ofrecido declaraciones adicionales sobre el incidente.
Mientras tanto, las deportaciones de inmigrantes indocumentados siguen. El año pasado 387.790 personas fueron deportadas, un tercio más comparado con el último año de la presidencia de George W. Bush.
Ante las críticas de grupos de derechos de los inmigrantes, el gobierno asegura que la diferencia está en el aumento de personas deportadas con problemas criminales: en 2008 eran el 31%, mientras que entre octubre de 2009 y abril de 2010 llegaron al 48%.
La prensa en Estados Unidos ha bautizado a la niña peruana que le increpó a la esposa de Barack Obama sobre las leyes antiinmigrantes como “la cara de la inmigración”.
Tal ha sido la repercusión que han ocasionado las frases de la pequeña peruana, revelando que su madre no tiene documentos, que varios noticieros e incluso senadores de ese país han aprovechado el reclamo para exigir a la administración Obama sacar adelante la frustrada reforma migratoria y declarar improcedente la Ley Arizona.
El noticiero Fixed News Channel escogió la imagen de nuestra compatriota para “humanizar” los problemas de los inmigrantes en EE.UU. y abrir un debate sobre el tema.
Por su parte, el diario mexicano La Jornada reseñó así el encuentro de la pequeña, que cursa segundo de primaria, con la esposa del presidente de los Estados: “En el único acto de esta visita de Estado que no estaba coreografiado y prefabricado, la niña latinoamericana de una primaria que se atrevió a preguntarle a Michelle Obama si era cierto que su esposo se está llevando a los indocumentados y que su madre no tiene papeles, logró lo que ni juntos han podido ambos mandatarios: evitar una deportación y una separación más de familias inmigrantes en este país, y poner el tema ante la atención nacional en términos humanos y elementales”.