Un nuevo tramo del Camino Inca, que se ha denominado como
Camino Longitudinal de la Costa o Camino de los Llanos, fue reconocido por el
Área de Identificación, Registro e Investigación del Proyecto Qhapaq Ñan,
informó hoy el Ministerio de Cultura.
Los investigadores determinaron que el tramo del Camino Inca
hallado en Asia tiene un ancho promedio de 10 metros.
El camino se encuentra a pocos metros de la carretera
Panamericana Sur, en el distrito de Asia, en la provincia de Cañete, al sur de
la ciudad de Lima.
Precisa que esta sección del camino inca se inicia en la
cima del Cerro Largo, muy cerca del sitio arqueológico Paredones de Asia.
El tramo tiene una longitud aproximada de dos kilómetros y
se caracteriza por presentar muros de contención de alrededor de 0.50 metros de
altura.
Algunos bordes del camino están definidos por alineamientos
formados por acumulaciones de pequeñas piedras que definen una trayectoria
continua y recta. Conserva diez metros de ancho.
Según el Ministerio de Cultura, antes de realizar el
descenso del Cerro Largo el camino se bifurca en tres ramales: uno mantiene sus
alineamientos en los bordes y desciende la pendiente de 70 metros.
El segundo, ubicado al oeste, lo hace por medio de un segmento
de 10 metros de ancho, que conserva escalones con aproximadamente 30 peldaños
elaborados con piedra.
Esta parte del camino sería lo más representativo del
“Camino de los Llanos”. Ambos ramales se unen cerca de una pequeña elevación en
las inmediaciones de la localidad denominada Sarapampa.
El tercer ramal está definido por un alineamiento de piedras
y mantiene un ancho de alrededor de 12 metros. Al igual que los dos anteriores
se estaría uniendo en las inmediaciones de Sarapampa, rumbo hacia Cañete.
“Estamos ante uno de los pocos vestigios del Camino de los
Llanos que aún mantiene sus componentes en la costa central, y muy cerca de
nuestra ciudad capital (Lima)”, afirma Guido Casaverde, coordinador del Área de
Identificación, Registro e Investigación del Proyecto Qhapaq Ñan – Sede
Nacional.
Sostuvo que la mayor parte de este camino ha desaparecido,
ya sea por el crecimiento urbano o agrícola.
Subrayó además que esta sección del Camino Longitudinal de
la Costa tenía, según el investigador John Hyslop, una extensión aproximada de
3,943 kilómetros y junto al Camino Longitudinal de la Sierra bordeaba 5,658
kilómetros.
Ambos caminos formaron los dos ejes principales de la red
vial Inca e integraron de norte a sur la gran diversidad ecológica y cultural
de estas dos regiones en tiempos prehispánicos.
El Camino de los Llanos se habría desplazado en su mayor
parte por toda la costa peruana. Se habría iniciado cerca del centro
administrativo Inca de Cabeza de Vaca en Tumbes.
Desde allí se habría proyectado hacia el sur para
comunicarse con otros centros de control Inca como Farfán, Chan Chan, Manchán y
Paramonga; en Lima.
La vía habría pasado al lado de Tambo Inca en el distrito de
Puente Piedra y continuado en Pachacamac, Bandurria, El Salitre, Paredones de
Asia, Cerro Azul, el Palacio de Herbay, el Tambo de Locos, hasta Paredones de
Nasca, en Ica; y la Quebrada de Vaca, en Arequipa, entre otros.
Casaverde explicó que las investigaciones que el Proyecto
Qhapaq Ñan desarrollará en un breve plazo permitirán entender cómo se
articulaba con otros establecimientos Inca a escala regional.