Hoy Jueves 1º de Diciembre, se ha cumplido una jornada histórica, que ha superado todas las expectativas y que ante la negativa de resolver el punto específico de no ampliación del penal de Cantera, el pueblo lo ha transformado en paro indefinido.
Pero acá hay que resolver problemas de dirección, no hay cohesión respecto a cuál es el petitorio, por un lado las autoridades veían no construcción de otro penal y no ampliación del ya existente; el Frente solo no a la ampliación y el pueblo, sabio como siempre, pedía no ampliación del penal y si Hospital Regional y Universidad.
Este divorcio entre los dirigentes de la protesta, algunos por figuretismo, otros por debilidad en sus posiciones hizo que no hubiera una correcta relación entre los dirigentes acá en cañete y las autoridades allá en Lima. Ha quedado demostrado que las autoridades en Lima no sabían de la tremenda protesta que se tenía en Cañete, eso les hubiera permitido actuar con iniciativa; pero no la tuvieron y no pidieron lo que el pueblo exigía: no ampliación y si hospital.
Una oportunidad que no debimos desaprovecharla, espero que no sea tarde, pues ante la contundencia del paro de hoy día, si el jefe del Inpe se negaba a dar marcha atrás en la ampliación del penal de inmediato era cortar ese diálogo y exigir conversar con Salomón Lerner, de tal manera que había conjunción entre los actores de la protesta: por un lado la masa poblacional en las pistas y sus autoridades luchando por hablar al más alto nivel. Esto implicaba que el reclamo se transformaba en algo superior: pedir el dinero para el hospital regional y el dinero de la ampliación sea usado en construir la laguna de oxidación del Penal de Cantera.
Como ya se definió seguir, ahora con paro indefinido, debemos pedir tratar con Salomón Lerner, y no con los del Inpe, ellos no resuelven; sin embargo Lerner si tiene todas las prerrogativas de decisión política, más aún que están heridos por la presión social en todo el país.
El pedido del pueblo es uno solo: NO PENAL, SI HOSPITAL Y UNIVERSIDAD, eso hay que plasmarlo en el trato con Salomón Lerner, no transigir, ya estamos en una situación, como diría Marx: Aquí está la rosa, baila aquí.